Victor Hugo Caicedo
El salario hace parte de los costos de producción de cualquier
actividad que se encamine para la generación de la riqueza, por la prestación
de la fuerza de trabajo. El salario es establece por la interacción la oferta y
la demanda del mercado laboral o es simplemente el precio de mercado. Este
precio está basado en el precio natural, que es el precio de los alimentos de
la canasta básica familiar necesarios para el sustento de todo el núcleo
familiar y además que asegura el relevo generacional, para que así de esta
forma no se presente una escases por demanda de la mano de obra que elevara el
precio de mercado. El precio natural está determinado por el costo de
producción de los alimentos y utensilios básicos para preservar la dignidad y
una buena calidad de vida a las personas, que dependiendo del país, esta concepción
variara por sus costumbres culturales. El salario depende de las condiciones
que se presenten en la forma y mecanismos de producción de las mercancías, en
donde el capital es trascendental en la fijación de los salarios, porque este
puede tener dos connotaciones, la primera es que aumente y al mismo tiempo eleve
el valor de las mercancías, lo cual esta ocasionado por el aumento de la mano
de obra, y el segundo, el capital aumenta pero su valor de las mercancías
disminuye generado por los avances tecnológicos, que hace que se requiera menor
cantidad de la mano de obra. El aumento
del capital de forma constante y gradual, genera que se presente una oferta de
trabajo y por ende un aumento demográfico por haber mayores recursos que
garantizan este aumento.
Pero toda la acumulación de capital y el aumento demográfico
dependen de cómo es que están las condiciones de productividad que la mano de
obra, y además la productividad esta mediada por la fertilidad que los suelos
presenten. Los mejores suelos deben que ser fértiles y además estar más cerca
de las vías y los mercados, por tener menores gastos que incrementen el costo
de la producción (las tierras que se alejan de estas dos parámetros se les
incrementa los costos, pero a los que están más cerca se ven beneficiados
porque sus productos al tener un menor valor, se transan con el producto de
mayor valor que les garantiza una aumento en la tasa de ganancia). A medida que
se incrementa la población se tiene que aumentar el área destinada a la producción
de alimentos (la frontera agrícola), y en esta busque se encuentran tierras con
condiciones menos fértiles y alejadas de los mercados que eleva los costos por
la cantidad de mano de obra que se tiene que emplear, haciendo que el precio
del salario tenga que aumentar. Nobstante, las capacidades de producción de las
tierras independientemente de si son o no fértiles dependen de los manejos
técnicos y culturales que se tengan, por lo menos, en las tierra que por su adecuado
desarrollos geológico (composición mineral del suelo) y biológico (estructura
meso y microbiológica) son muy fértiles, pero que si se someten a una
explotación continua sin la aplicación de nutrientes que suplan la extracción
que realiza la planta (en su desarrollo vegetativo y floral) llegaran a un
punto que se convertirán en muy pocos fértiles y productivos. Los suelos que
son de una baja calidad pueden llegar hacer muy productivos con un manejo
adecuado en la aplicación de nutrientes que mejores su estructura, que esto
conlleva a un incremento de la costos, pero con la alta producción de alimento
que se va a obtener se compensa.
Los avances tecnológicos en las técnicas y maquinaria benefician
a que se dé un aumento demográfico y de la riqueza. La tierra nos vuelve a
sorprender con otra forma de generación de valor a las mercancías, en este caso
define el salario de las personas, que es el que le permite a las personas
poder vivir y sostenerse.
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