“Nos hallamos en una situación en
la que, de modo constante,
se nos incentiva y predispone a
actuar de manera
egocéntrica y materialista.” -Zygmunt
Bauman
Un versículo de la biblia
dice: “Porque al que tiene, se le dará más y abundará; y al que no tiene, aun
aquello que tiene le será quitado.” (Mateo: 13). Espero que no sea tema de
discusión la frase de la biblia ya que esta misma se puede interpretar de
diversas maneras pero me voy a centrar de manera subjetiva, ya que nos podemos
dar cuenta que a través del tiempo, de la historia , de diversas fuentes,
siempre esta esa disposición a admirar, y casi a idolatrar, a los ricos y a los
que poseen el poder, mientras se desprecia o, como mínimo, se ignora a las
personas pobres y de condición humilde; se puede considerar que esa es la
principal y más extendida causa de corrupción de nuestros sentimientos morales.
Adam Smith en su escrito de la teoría de los sentimientos morales propone que,
donde sea que haya una gran propiedad,
hay una gran desigualdad. Entonces por cada hombre rico debe haber por lo menos
una mayoría pobre. Podríamos con lo anterior mirar nuestra realidad colombiana,
ya que nuestro país es casi manejado por cinco familias adineradas y una
población empobrecida (Smith, 1759); los que estén empoderados del tema de
progreso o proyecto de la modernidad deben estar avergonzados al ver estas
desigualdades sociales ya que varios estudios demuestran que la riqueza la
equipara solo el 1% de la población mundial.
En este profundo barranco que separa
a los pobres ya agóbianos, desanimados por generaciones, que se ven casi sin
futuro a diferencia de los ricos, optimistas, seguros de sí mismos y sin
complejos. Un barranco de tal profundidad que excede la capacidad de explorar de
manera más valerosa y valiente para concretar o delimitar su totalidad. Esa es una
buena razón para estar enormemente preocupados y saber que a medida que todos
los bienes necesarios, cada vez más escasos e inaccesibles, para la
supervivencia y para llevar una vida aceptable se conviertan en objeto de una
rivalidad brutal (y de pronto guerras) entre los que tienen y los que están desesperadamente
necesitados.
Este afirmación, dicho de
manera tan tranquila, y que no es más que una verdad a medias; se puede decir
que los diferentes medios masivos de comunicación y diferentes datos
estadísticos oficiales demuestran ya esa distancia cada vez mayor que separa a
los de arriba de los de abajo en la jerarquía social. (No hablo de estratos
sociales, solo de clases sociales propuestas por Marx), como cite al inicio del
texto, el evangelio de Mateo en la historia del mundo ya no es noticia que la
desigualdad tiende a multiplicarse y a extenderse de manera cada vez más
rápida. Ya hoy por hoy tenemos a interesados en el tema de la desigualdad como
Chang o Piketty y otros ilustrados; como lo llegaron a ser en su tiempo
ilustres como Karl Marx o Engels, entre otros. Estos temas no se pueden llevar
a la ligera ni dejarlos pasar porque no podemos seguir en esta condena heredada
de la desigualdad y dejarnos llevar con frases como “así me tocó vivir” o “así
lo quiso el destino” sin cuestionarse que quizás sea culpa del propio sistema y
sus fallas. No podemos estar condenados a vivir de la inseguridad, de la
fragilidad, de lo momentáneo, de lo transitorio. La idea no es crear una
revolución como en su tiempo lo hizo Karl Marx, sino generar conciencia, ¿que
como se logra? No tendría una respuesta, después de todo solo soy un estudiante
de economía con pocos conocimientos y argumentos que esta apenas adentrándose
en este gran mundo de la economía.
I.D. 104416010723
¡Hola!
ResponderBorrarEstoy de acuerdo contigo en muchos aspectos, me llama mucho la atención que el dinero se vuelva un atractivo y un diferenciador de personas. Estamos en el punto donde cualquiera que tenga una buena condición económica es una persona bienvenida en nuestro circulo social, pero todo lo contrario ocurre si una persona de bajos recursos trata de ingresar a ese grupo, no le queda fácil porque inmediatamente se le juzga; ya sea por su aspecto o cualquier otro motivo superficial sin tener en cuenta la calidad de persona que pueda ser.
La brecha entre ricos y pobres toda la vida ha sido clara y supremamente grande, lo que ocurre es lo que tu dices; gracias a los medios de comunicación nos damos cuenta de lo que ocurre aún así nos hagan ver lo que ellos quieren que veamos la realidad no se puede evitar. Se convierte entonces, en un problema bioeticolas guerras entre clases por alimento, una necesidad tan básica que no debería poner en problemas a millones de personas alrededor del mundo.
Sera muy dificl combatir la desigualdad en el sistema capitalista manejado por completo por unos pocos y que en el camino hacia la acumulacion deja victimas, problemas sociales y conflictos internos alrededor del mundo. El libro de Smith "la teoria de los sentimientos morales" me parece muy acertada, deja en claro que es lo que mueve al hombre y lo que lo centra en lo que quiere.
Saludos :D
Mario Mendoza hizo un experimento cuando trabajaba como profesor en la universidad Javeriana de Bogotá, busco un(a) estudiante de la universidad que tuviera relaciones de pareja con un(a) joven de estrato uno y dos. El resultado fue de cero. No había persona alguna que tuviera sus relaciones amorosas en los estratos uno y dos. Mendoza dice que esta discriminación puede llegar a clasificarse como un tipo de violencia pasiva, de violencia transpolítica.
BorrarCordialmente. Jorge Rivadeneira.
La desigualdad es un asunto inocultable. Pero pasemos a otra cuestión; ¿es necesaria una igualdad completa?, no es acaso una falacia pensar en un sistema en el que todos dispongan de los mismos recursos sin diferenciación alguna.
ResponderBorrarLa desigualdad debe existir, el asunto aquí es, que esa desigualdad no debe ser, valga la redundancia, tan desigual. El asunto de importancia en el sistema capitalista, es cerrar las brechas entre ricos muy ricos y pobres muy pobres, la tendencia de una sociedad fuerte y de una economía fuerte debería radicar en la clase media.
Cordialmente. Jorge Rivadeneira.
Buenas noches.
ResponderBorrarCuando terminas tu texto planteas que hay que generar conciencia, pero, ¿generar conciencia de qué exactamente?. Puesto que a mi parecer el problema no está en una sociedad que presente niveles de desigualdad, sino cuando esos niveles son tan extremos que llevan a una vida de miseria, pobreza e incertidumbre. Ya que de vivir en una sociedad totalmente igual se haría casi que imposible que todos los trabajos fuesen ocupados, puesto que, tal vez empleos que fuesen un poco tediosos no serían ocupados ya que no existiese esa 'necesidad' de obtener un salario o por la posibilidad de poder obtener uno mejor.
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ResponderBorrarSi hablamos de desigualdad, indudablemente tenemos que mencionar a nuestro país, pues como ya sabemos, estamos dentro del podio de finalistas en ese aspecto. “El rico cada vez más rico y el pobre cada vez más pobre”, una frase de cajón tan popular en el mundo, es más, probablemente hasta ha de tener su traducción o por lo menos su equivalente en otros idiomas. En realidad, las personas del común son muy conscientes de tal desigualdad, porque es algo perceptible a simple vista, no hace falta ser un genio o tener grandes conocimientos sobre economía para saber que nuestros “amigos de corbata” y demás personajes derivados de la alta clase social, albergan entre sus pertenencias gran cantidad de bienes y dinero, pero (en este tema siempre hay un “pero”), los colombianos de a pie toleramos estas grandes diferencias por la simple razón de que debemos preocuparnos por no morir de hambre, por darle de comer a los hijos, por tener que vestir, tener donde pasar la noche, en fin.
En realidad, el gran éxito de los ricos, es hacer que el pobre tenga tanto de que preocuparse que no le preste atención a esos “pequeños” detalles de nuestra sociedad tan desigual. Incluso nos ponen a pelear entre nosotros, como si de una pelea de gallos se tratase, donde los gallos pelean hasta la muerte y no importa quien salga victorioso, el ganador siempre será el dueño, pero en nuestro caso no son solo riñas con golpes las que tenemos, sino también, peleas ideológicas, donde muchas veces hasta peleemos por cosas tan absurdas como defender a un político corrupto o nos “sacarnos los ojos” por redes sociales cuando alguien piensa diferente a nosotros. El día en que seamos capaces de encontrar entre tantas distracciones el verdadero problema de fondo, ese día revertiremos la desigualdad en el país.
Buena Noche. la desigualdad es un tema que nos ofrece un panorama muy negativo, es triste ver como mientras unos mueren de hambre otros no saben donde ni como guardar sus riquezas, el problema es la mala distribución de las riquezas que ofrece el sistema capitalista,también en parte hay cierta corrupción, pues los cargos altos que son bien remunerados pero siempre los comprar quienes tienen mas dinero, la pregunta es cuando comenzar a cambiar el sistema.
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