En la distribución del ingreso por la venta de la producción
de trigo en la renta diferencial de la tierra, de David Ricardo, se destaca como principales actores el
terrateniente y el capitalista, pues uno tiene la tierra y el otro dinero. El
trabajador es tomado en cuenta, pero es un actor secundario, que se debe acomodar a las condiciones impuestas
por los dos actores principales. Esta dinámica prevalece hasta nuestros
tiempos, pues los desposeídos aún deben tratar de acomodarse a las condiciones
impuestas.
Los clásicos y sus hijos neoclásicos abogan para que el
estado no intervenga en la definición de los salarios, que el trabajo es una
mercancía más y que el mercado, con su sobrevalorada sensatez, puede definir el
precio del trabajo en el macabro juego de la oferta y la demanda; el salario debería
ser el más cercano posible para permitir a un obrero que esté en condiciones de
trabajar, ni más ni menos, solo un punto de equilibrio que les permita
sobrevivir, subsistir; una estrategia similar usada para mantener a las mulas
usadas para el trapiche.
Pero si el precio del trabajo solo se definiera teniendo en
cuenta la oferta y la demanda del trabajo sería un sueldo inhumano que
permitirá solamente existir para el trabajo, para nada más. El salario mínimo
debería garantizar alimentación, educación, salud, vivienda, vestido y
recreación en el caso colombiano ¿689.454 pesos si alcanza para cubrir todas
esas necesidades? Por las experiencias de personas que ganan esa cantidad es un
rotundo NO, al menos no todas las necesidades se satisfacen y muchas veces se
deben sacrificar unas cosas por otras; esto también depende del tipo de
familia- aunque parezca obvio- pues no es lo mismo un salario mínimo para una
persona sola que un salario mínimo para mantener 2 o más personas, las
condiciones cambian y el grado de dificultad es relativo. La intervención del
estado a la hora de fijar los salarios mínimos evita un poco que las ciudades
sean infernales y los ciudadanos locos. Cada que empresarios y obreros entran a
discutir sobre el aumento de salario mínimo nunca hay un consenso, porque los
intereses son distintos, por tanto el estado interviene y fija el aumento por
decreto.
Si el estado se convirtiera en un simple observador de como
el mercado hace su magia los conflictos sociales serian de mucha más
envergadura, pues los precios de la mano de obra serian paupérrimos, el
garantizar alimentación, educación, salud, vivienda, vestido y recreación seria
solo un idilio, una quimera, pues los empresarios trataran de dar lo menos
posibles y tienen la ventaja significativa de tener la batuta, de tener al toro
por los cuernos, pues ellos tienen la potestad de contratar o no hacerlo, pues
controlas los medios de producción, el capital. Pero por fortuna, o al menos el
mejor de los peores casos posibles, el estado entra a mediar, a tratar de
conciliar y es importante, pues de otra manera los obreros estarían
desprotegidos y la mayoría de empresarios darían rienda suelta a su despotismo
y egoísmo.
Buenas tardes.
ResponderBorrarPienso que el estado es un buen intermediario a la hora de fomentar distintas leyes o decretos para el ciudadano, puesto que en una empresa este da por obligación lo que se debe realizar para el bienestar del empleado, porque de lo contrario como nos expresa el texto se dan por conchudos y egoístas los empleadores, y lo que realmente hacen es ser corruptos con aquella persona que este ejerciendo un trabajo en la empresa, por lo tanto en ese sentido es bueno que ocurra la intervención del estado.
Por otro lado, sobre lo que es el salario mínimo, en este caso en Colombia, sinceramente es un fracaso, debido a que en lugar de ayudar a subsistir con buena satisfacción, lo que hace es empeorar, ya que cuando el salario sube, todo lo demás incrementa de precio, haciendo que todo sea cada vez poco probable y esperanzador, generando que el ciudadano se mate más trabajando por las supuestas horas extras porque realmente el mínimo no es óptimo para todas aquellas necesidades que son obligatoriamente indispensables suprimir, por consiguiente en este caso el estado es efectivamente un desastre y un poco inteligente, no busca el bien común o el cómo abolir la pobreza en la nación, ya que es por esto lo que hace que cada vez hayan más pobres y ricos cada vez más ricos.
Y si, pueda que el estado sea un buen intermediario en los conflictos que se generan por motivo del salario, para evitar eso decreta tal decisión, pero también debería ver que realmente ayuda y da óptimas condiciones de vida al ciudadano.
buenas noches! claramente no en todos los paises se ve la intervencion del estado, en algunas partes la mano de obra es tan barata que pone a los obreros en unas situaciones inhumanas, incluso se podria decir que trabajan por comida, por fortuna si somos un país que en medio de su corrupción aun propone ciertos subsidios para la población. aunque no busquen el bienestar de toda la población es una de las funciones que tiene que cumplir. felicitaciones por tu texto
ResponderBorrar“Con frecuencia se afirma que no hay democracia sin libre mercado. Esa es una argucia.
ResponderBorrarEn realidad, la democracia y el mercado no son necesariamente compatibles. Mientras la democracia busca la igualdad y la justicia como valores fundamentales del sistema social que auspicia, el mercado tiene otros objetivos y valores. La democracia acepta la diferencia de opiniones y de creencias pero no las diferencias económicas. La libertad de la democracia es distinta de la libertad del zorro en el gallinero que implanta el mercado. Para la democracia hay ciudadanos, para el mercado: consumidores. Los ciudadanos poseen los mismos derechos, en tanto que las prerrogativas de los consumidores dependen de su poder de compra.”
Bien, en una sociedad y en un economía dominada por un sistema capitalista, el estado, interviene más que como ente controlador, como un cuerpo que acumula y legitima la explotación, es decir, hace legal el abuso de trabajadores por miserables sueldos y hace creer que eso está bien, y los ingresos del estado no alcanza para dar más, trata de controlar y complementar las funciones y relaciones que se dan entre el mercado y sus protagonistas: consumidores, actúa como un garante que le permite al empresario fijar precios, y salarios sin pensar ni más ni menos que en sus intereses y ganancias.
Lo aclaras tú, y estoy de acuerdo, lo resumo con que debería ser prioridad del estado la educación, la salud, la seguridad social, la calidad de vida, pero lastimosamente no sucede, en una economía capitalista no se logra si quiera la aproximación mínima a igualdad, ni a derechos fundamentales.
http://www.elcomercio.com/opinion/y-mercado.html
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarbuenas noches, el estado con sus "intervenciones" la verdad es que no ha logrado mucho, si hace una ley, decreto, etc sobre el salario mínimo es para pasar de lo miserable a lo menos miserable, pero no una mejora como tal.
ResponderBorrarExisten innumerables herramientas con las que el estado, interviniendo puede moldear la economía más o menos a su gusto y dentro de estas herramientas tenemos los impuestos, los subsidios, controles de precios y el gasto público que por lo visto, siempre benefician no a los pobres si no a los ricos y a sus ideales. No digo que sea inservible su intervención pero es claro que no es suficiente y que no beneficia a todos.
"El esfuerzo contra la corrupción es inservible, porque siempre que el Estado intervenga estaremos lanzando una moneda al aire. Cuando el gobierno se entromete en la economía, ya sea dando dinero público o regulando, se está abriendo la caja de Pandora, ya que se está dando a elegir dos caminos a las empresas: que vayan por el camino difícil, lleno de competidores, regulaciones, impuestos, etc. o que vayan por el camino fácil, en el cual solo entregar unos simples sobres o conocer al político de turno te libra de todo estas regulaciones o te da dinero sin apenas esforzarte. Y contratar nuevos funcionarios para que les controlen es inservible, ya que cada funcionario es un potencial corrupto, el nuevo funcionario puede ser sobornado tanto como el antiguo". Todos buscan ganar para si mismos, sea quien sea y aun un funcionario que debería velar por los intereses de todos, vela por los suyos y ya esta, estamos en una sociedad capitalista entonces que mas se podría esperar.
Felicitaciones por tu texto.
http://www.libertario.es/intervencion-corrupcion/
¡Hola!
ResponderBorrarNo voy a ahondar mucho en el tema porque no me parece pertinente, los comentarios anteriores y tu texto lo dejan claro y no quisiera pasar a decir lo mismo.
Lo que quiero decir es que el papel del estado dentro de la economía es fundamental, ya que es absolutamente indispensable para el funcionamiento del capitalismo tal cual como lo conocemos. El mercado no puede prescindir del estado porque entonces ¿quien garantizaría los contratos para que fueran legítimos? por ejemplo. Sin ese garante como lo es el estado, el mercado simplemente no podría funcionar ya que muchas cosas podrían suceder. El estado debe ser eficaz y satisfacer por lo menos las necesidades básicas, priorizar la educación, entre otros.
Saludos :D
ResponderBorrarSin duda el estado no es perfecto a la hora de fijar el salario mínimo, obviamente porque debe considerar todos los agentes que afecta el decretar un salario mínimo alto o bajo, se debe tener en cuenta tanto el punto de vista del empresario como el del empleado, uno quiere pagar poco y el otro ganar mucho. Ciertamente es una decisión difícil y habrá quien quede contento y quien se sienta “robado”, pero indudablemente no podemos negar la importancia del estado para tomar este tipo de decisiones, además de otras igual de importantes.
Debido a la naturaleza del capitalista, si el mercado no tuviera intervención del estado, el empresario seguramente haría todo lo posible por pagar poco a sus empleados y explotarlos mucho más, es ahí cuando nos damos cuenta de que a pesar de nuestra actual situación, en donde muchos consideramos que el salario mínimo es una miseria, alivia en parte el saber que pudieron haber elegido un destino más cruel para nosotros, pero por motivos que quizá nunca sabremos tuvieron algo de compasión, aunque me gustaría que hubiesen tenido un poquito más :v
buena noche !
ResponderBorrarrespecto a esto nos encontramos con un estado cada vez mas vendido, y esto es mas que un comentario a un llamado a actuar a dejar de hacernos el de la vista gorda, asi donde iremos a parar,quiza nos toque ser esclavos como en aquellos paises que a los trabajores deben tener pañales puestos para que no desperdicien el tiempo yendo al baño, que tipo de racionalidad es esta, es un capitalismo dañino,conveniente explotador que cada vez esta mas fuerte y mas controlado por los empresarios que no estan dispuestos a ceder ni un poco de sus ganancias para el bienestar de sus trabajadores que son los creadores de estas mismas. Y claro todo esto en complot con nuestros corruptos y nefastos gobernantes sin moral en busqueda de conveniencias y bienestar solo para los suyos afectando directa e inderactamente a millones de personas de la clase trabajadora, y lo que mas me indigna que aun asi hay personas, hijos de trabajadores que obtienen de sueldo una miseria, los defiendan a estos.
quisiera un comentario mas corto
ResponderBorrar