miércoles, 2 de septiembre de 2015

¿EL BIEN COMÚN ES IMPORTANTE PARA LA ECONOMÍA?



Si bien sabemos, para los mercantilistas la riqueza se daba a través del comercio internacional, en donde la acumulación de metales preciosos constituía la fuente del enriquecimiento de la nación.  En cambio para los fisiócratas la riqueza se daba a través de la naturaleza, de la tierra como factor principal, por ende para ellos el sector que genera riqueza es la agricultura. Ahora bien estos pensamientos clásicos tienen unas teorías que en su época eran las que mejor se aproximaban en cuando a la generación de riqueza de una economía pero dentro de todos sus modelos  no se tenía en cuenta a la sociedad.
Desde mi punto de vista y respetando a estas escuelas del pensamiento clásico , pienso que eran demasiado egoístas y no tenían en cuenta el bien común, digo esto ya que a mi modo de entender estos pensamientos, solo se preguntaban ¿cómo generar riqueza? y todo esto sin considerar las consecuencias que traería para la sociedad.  Las teorías económicas se han fundado con criterios en los cuales, lo útil es solo aquello que llega a producir beneficios. Por eso no se tenía en cuenta a la sociedad respecto de su realidad material. El ejemplo claro lo tenemos con los mercantilistas, ya que su principal objetivo era el comercio internacional y no el interno, se explotaba la industria con el objetivo maximizar la exportación de productos, llegando en algunos casos a una excesiva extracción de recursos que extinguía los mismos. Mientras tanto se fomentaba el proteccionismo en el comercio local, los precios fueron en alza y se formaron monopolios comerciales, generando en la sociedad un malestar pues solo algunos se beneficiaban de la actividad mercantil, aumentó el desempleo, sumados estos dos factores, el resultado fue el surgimiento del contrabando y el comercio clandestino, en el cual no se pagaban aranceles, defraudando los ideales de los reinos de constituir estados-naciones fuertes, pero los mercantilistas no tuvieron en cuenta estas realidades sociales, ya que para ellos la pobreza, el desempleo, el descontento social, no eran un problema ya que no afectaban su modelo económico. Cuando los fisiócratas empiezan a fundamentar sus pensamientos caen en cuenta que el método mercantilista tenía un error y optaron por darle un empujón al comercio interno liberando al mercado del control estatal. Fundamentaron su teoría sobre la riqueza en la tierra, por lo cual la sociedad entra a explotarla para poder producir lo que necesitaban. Era necesario que las personas tuvieran ingresos para que así el mercado interno fuera positivo, aunque eso no significaba que esté fuera generador de riqueza, a fin de cuentas el modelo fisiócrata fue en decadencia por su carácter anticuado y por no tener en cuenta el crecimiento económico de la época que se fundamentaba en el comercio exterior y en las relaciones que se gestaban entre los estados y los particulares en el ámbito internacional,  esto generaba que sus instituciones no fueran aptas para controlar las situaciones y problemas que surgían en la realidad de las masas, aunque estos importaran al ámbito económico.
A lo que quiero llegar es que tanto en el siglo XVIII, como en el siglo XXI la sociedad en su totalidad no es importante si no genera riqueza y que el abaratamiento de la mano de obra, los sueldos mal remunerados, la explotación laboral a la mano de obra no calificada, etc. Sigue siendo algo normal en el funcionamiento económico de la sociedad, pienso que a pesar de que en el neoclasicismo se hayan cambiado algunas formas del pensamiento de los clásicos, muchas de las teorías no incluyen un bien común y así ahora el estudio de la sociedad sea importante, ignoran a la población que vive en miseria o en pobreza. Por ende en nuestra actualidad no se tiene en cuenta a todos y la igualdad no se ve. Todos sabemos que la economía se funda en el egoísmo y en el bien propio, y es una realidad que tenemos desde nuestros comienzos así que no es raro ver que ahora no se piense en el bien común.
“la pobreza de los más, precisamente de aquellos de los que se esperaba su desempeño sistemático en los trabajos productivos, de aquellos que ponían en marcha el dispositivo fundamental que creaba la riqueza de la nación, resulta ser, finalmente, no solo necesaria, sino estrictamente útil. (…) La tesis de la utilidad de la pobreza descansa en presupuestos que, según sus intérpretes fueron evidentes para la generalidad de los tratadistas de la época. Tales presupuestos han sido profusamente asumidos y respaldados por una importante tradición historiográfica. Utilizando los términos en los que esta última suele expresarse, la utilidad de la pobreza no es otra cosa que el subproducto ideológico de un fenómeno característico y fuertemente arraigado en las sociedades europeas preindustriales y, en toda sociedad tradicional. Tal fenómeno suele denominarse, en términos sociológicos y antropológicos, <<predilección por el ocio>>. La predilección por el ocio y no por el trabajo como pauta general de comportamiento de todos aquellos que aseguran la necesaria oferta de trabajo manual. Por su parte, los economistas suelen reservar para el mismo fenómeno la expresión más técnica de <<curva de la oferta decreciente>> de trabajo (backward-bending supply curve)(…) la tesis de la utilidad de pobreza viene a ser el trasunto discursivo de la fórmula que conjura los efectos perversos, económicos y morales, de este fenómeno indiscutible.” 1
 “por lo que se ha dicho queda bien demostrado que en una nación libre, en la que no se permite la esclavitud, la riqueza más segura consiste en una multitud de pobres laboriosos (…) Para hacer feliz a la sociedad y tener contentas a las gentes, aun en las circunstancias más humildes, es indispensable que el mayor número de ellas, sean al tiempo que pobres, totalmente ignorantes. El saber amplia y multiplica nuestros deseos y cuantas menos cosas ambicione un hombre, mucho más fácilmente se satisfarán sus necesidades”2
De acuerdo a lo que cite anteriormente me gustaría argumentar como estos autores ven lo que quiero resaltar, que al hombre no le interesa el bien común y como no lo mencionan se necesita de la ignorancia de los más pobres para que sus necesidades se satisficieran más fácilmente y con menos ingresos ya que explotarlos les salía mejor si ellos no necesitaran tanto. Y que el bien propio es el triunfo de una economía sobresaliente.
Johana Marcela Castillo Rivera.





1 Homo Faber: historia intelectual del trabajo, 1675-1945
2la fábula de las abejas, p.121




2 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo en que se debería tomar no solo intereses materiales y generar riqueza, ¿pero qué podemos hacer respecto a esto? No mucho, por que los intereses económicos en beneficio propio se ha visto desde hace mucho tiempo no solo en los mercantilistas, puesto que ellos partieron de necesidades y satisfacciones propias por tanto, que mejor que el comercio exterior para de ese modo traer las riquezas de otras naciones para ellos acumularlas, pero para que más serbia obtener muchos metales preciosos si no para atesorarlos. Es notable el pensamiento errado que tenían los mercantilistas en ese tiempo respecto a acumular metales preciosos, pero al pasar de los tiempos ha ido evolucionando con la perspectiva de intereses propios y descuidando los intereses de la sociedad, es notorio en muchos países esta forma de pensar que ha prevalecido. Por otro lado se dice que la economía es una ciencia social, pero desde un enfoque diferente, un profesional economista al ser contratado en una empresa, su misión es buscar formas de que la empresa tenga un equilibrio dinámico y buscar la manera de generar ganancias, el otro caso puede presentarse en que el profesional no sea el empleado sino más bien el jefe de su propia empresa, y por ende ¿qué quiere un jefe? Ganancia. Si lo analizamos de esta manera sabemos que esa es nuestra realidad egoísta, aunque vale la pena decir que hay quienes tienen otros enfoques, en cuanto a la búsqueda de una sociedad más equitativa, y existen quienes se preocupan por ello, pero lamentablemente son pocos y ganan por mayoría los intereses que cada quien tome, y estos intereses suelen ser egoístas. Con base a esto sabemos que la economía es muy compleja y son muy extensos sus niveles de ocupación, por ello cada economista elige una postura profesional.

    ResponderBorrar
  2. Estoy de acuerdo en que se debería tomar no solo intereses materiales y generar riqueza, ¿pero qué podemos hacer respecto a esto? No mucho, por que los intereses económicos en beneficio propio se ha visto desde hace mucho tiempo no solo en los mercantilistas, puesto que ellos partieron de necesidades y satisfacciones propias por tanto, que mejor que el comercio exterior para de ese modo traer las riquezas de otras naciones para ellos acumularlas, pero para que más serbia obtener muchos metales preciosos si no para atesorarlos. Es notable el pensamiento errado que tenían los mercantilistas en ese tiempo respecto a acumular metales preciosos, pero al pasar de los tiempos ha ido evolucionando con la perspectiva de intereses propios y descuidando los intereses de la sociedad, es notorio en muchos países esta forma de pensar que ha prevalecido. Por otro lado se dice que la economía es una ciencia social, pero desde un enfoque diferente, un profesional economista al ser contratado en una empresa, su misión es buscar formas de que la empresa tenga un equilibrio dinámico y buscar la manera de generar ganancias, el otro caso puede presentarse en que el profesional no sea el empleado sino más bien el jefe de su propia empresa, y por ende ¿qué quiere un jefe? Ganancia. Si lo analizamos de esta manera sabemos que esa es nuestra realidad egoísta, aunque vale la pena decir que hay quienes tienen otros enfoques, en cuanto a la búsqueda de una sociedad más equitativa, y existen quienes se preocupan por ello, pero lamentablemente son pocos y ganan por mayoría los intereses que cada quien tome, y estos intereses suelen ser egoístas. Con base a esto sabemos que la economía es muy compleja y son muy extensos sus niveles de ocupación, por ello cada economista elige una postura profesional.

    ResponderBorrar